Perfecta comunión de voces e instrumentos acoplados con singular maestría. Cantares que suenan a varios y nos hacen mecer en nuestras memorias el espíritu universitario al compás de aquellas capas que siguen una canción; cintas de mi capa, horas de ronda, tuna de enero…
El contrabajo marca el ritmo, la guitarra acompaña las voces y la pandereta baila entre las manos, pies y rodillas del tuno más inquieto…
Seguís cantando y tañendo vuestros instrumentos como se hiciera desde el Siglo XIII. Eso es la Tuna, pura esencia; un orgullo.
Me siento realmente agradecida por este honor. Al escucharos, me remonto a mi época universitaria. Vuestra música hace que me sumerja en grandes recuerdos que con anhelo, me llevan posiblemente a una de las mejores épocas de mi vida. Nunca pensé que sería madrina del Certamen organizado por aquellos que a cualquiera sacan una sonrisa y hacen valorar lo mejor de la vida. Por ello os estaré eternamente agradecida.
La tuna representa el espíritu alegre, jovial, romántico, guasón y apicarado, sensorial y humano. Por eso, Murcia es la ciudad ideal para acoger este Certamen, somos como la tuna: nuestro espíritu alegre y
nuestro carácter acogedor harán que os sintáis como en casa.
Os admiro y me sumo a vosotros. La vida es una fiesta y hay que saber disfrutarla. Vosotros sabéis aprovechar cada minuto y cada segundo alegrándoos y alegrándonos con un idioma universal, la mejor receta;… la música.