El Barrio, castizo donde los haya, ha encontrado en el Certamen Internacional de Tunas, que organiza la Tuna de Distrito, uno de los principales alicientes para sus Fiestas del Carmen. No es que antes no tuviera su gracia y su alegría, pero las noches de ronda bajo un firmamento cuajado de estrellas, cintas al aire tenue y mimoso de primeros de julio, han venido a darle una dimensión más universal.
La naturaleza no me hache cantor, pero sí me ha dotado de sensibilidad y espíritu algo tunante.
Mi agradecimiento a la Tuna de Distrito de Murcia por el honor que me hacen con este nombramiento, con el compromiso de continuar mientras me quede voz proclamando las excelencias de la Estudiantina.
Que el Barrio del Carmen vibre con coplas y pasacalles; que ventanas y balcones se abran a vuestro mensaje de eterna y alegre juventud; que desde las instituciones que corresponde se respalde cada año con más fuerza este Certamen que reúne a Tunas de la vieja Europa y de otros continentes, a las que Murcia hechizará con sus encantos, y de la que los tunos que hasta ella lleguen harán alabanzas, sobre todo, de la hospitalidad de sus gentes.
¡Aúpa la Tuna de Distrito de Murcia! ¡Arriba el Barrio castizo de Murcia! ¡Viva por siempre la Estudiantina